A lo largo de este mes de septiembre, en Petronor se están realizando trabajos de vaporización de tuberías, empleando compuestos amoniacales. Como resultado, se produce un olor nausebaundo que no hay quien lo aguante. Además también se producen fugas de amoníaco, que es un gas tóxico e irritante de las mucosas.
Se hicieron llamadas a todo el mundo, SOS-Deiak, Gobierno Vasco, Ayuntamiento, Petronor y nadie sabía nada, "no está pasando nada"; "no hay ninguna anomalía". Solo la torpeza de un funcionario del Gobierno Vasco nos dio la pista, ya que creyendo que llamaba a Petronor llamó a una vecina y le contó lo que estaba pasando, lo de la vaporización con componentes amoniacales. Así es como nos cuidan y protegen nuestras "queridas" instituciones y autoridades.